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El vapor es también ideal para blanquear, descongelar,
recalentar o para mantener calientes los alimentos, sobre todo
las salsas.
Para que las carnes (ave, ternera, cerdo) adquieran un
aspecto más suculento, saltéelas primero en una sartén con
un poco de mantequilla o aceite y déjelas dorar ligeramente.
Después, cocínelas al vapor.
Para aumentar la velocidad de cocción y lograr una cocción
más homogénea, corte los alimentos en trozos.
Principios básicos
El agua que contiene el depósito llega a la cavidad por un tubo.
Este agua se transforma en vapor al entrar en contacto con una
superficie caliente colocada en la parte inferior de la cavidad: se
trata del generador de vapor.
No es necesario añadir agua a la fuente de cocción. Para lograr
UNA VERDADERA COCCIÓN AL VAPOR, le recomendamos
utilizar los accesorios del horno, que han sido especialmente
diseñados para ello.
Generalidades
La cocción al vapor es altamente benéfica si se sigue el modo
de utilización. Sana y natural, la cocción al vapor conserva el
sabor de los alimentos. Una salsa ligera o hecha con hierbas
aromáticas bastará para darle un toque diferente a sus
comidas.
La cocción al vapor no transmite ningún olor, por lo que no es
necesario agregar hierbas o especias para aromatizar el agua
de cocción. Sin embargo, si desea perfumar ligeramente un
pescado, usted puede, por ejemplo, cocinarlo en un lecho de
algas, y en el caso de las aves, utilizar un lecho de romero o
estragón.
Usted puede además cocinar simultáneamente carnes,
pescados y vegetales.
Le permite recalentar pastas, arroz y puré sin alterar su
consistencia y sin resecarlos.
Facilita la cocción de cremas, flanes, pasteles de arroz...
cubiertos con papel de aluminio; el agua de condensación no
los reblandece.
No es necesario salar los alimentos antes de cocinarlos, ni
siquiera el agua de cocción.
Para que las carnes tengan un aspecto más suculento,
coloque mantequilla en una sartén y dórelas rápidamente por
cada lado.
Comparada con la cocción en agua, las ventajas de la cocción
al vapor son innumerables:
Es rápida: la cocción empieza inmediatamente. En el caso de
los alimentos cocinados en un recipiente con agua, la cocción
sólo empieza al momento de la ebullición.
Es sana: los alimentos conservan sus vitaminas (sobre todo
las denominadas hidrosolubles) y sales minerales, ya que
apenas se disuelven en el agua condensada que los envuelve.
Además, este tipo de cocción no necesita ningún tipo de
materia grasa.
El vapor respeta el sabor de los alimentos, ya que no agrega
ningún olor o sabor a quemado o tostado, ni tampoco lo
disminuye al no estar éstos sumergidos en el agua.
Desventaja: si desea cocinar al vapor un pescado que no está
fresco o un vegetal que ha pasado una semana en el
refrigerador, ¡el resultado es simplemente catastrófico!
El vapor no transmite ni sabores ni olores; por lo tanto, no
dude en ahorrar tiempo y dinero cocinando al mismo tiempo
un pescado y un postre, por ejemplo, colocándolos en el
horno, uno al lado del otro, evitando por supuesto cualquier
tipo de contacto entre ambos.
La cocción al vapor
Atención
Antes de cada cocción, es OBLIGATORIO llenar el
depósito con agua hasta el nivel máximo. Coloque el
depósito nuevamente en la base, presionando
FIRMEMENTE hasta que sienta el PASO DE UNA
MUESCA.
Atención
El aparato se calienta durante la cocción. Al abrir la
puerta del aparato, se escapará vapor caliente. Por lo
tanto, mantenga el horno fuera del alcance de los
niños.